Algunas de las organizaciones más admiradas del mundo afirman que perderán la mitad de sus empleados clave en los próximos cinco años.

Esto es sólo la punta del iceberg. Una mayor escasez de talento amenaza con nublar el horizonte, aun cuando se incorporan nuevas generaciones al mercado laboral, tan llenas de expectativas que pueden transformar fácilmente la forma habitual de hacer las cosas.

El escalafón corporativo tradicional está desapareciendo bajo el peso del cambio—dando lugar a una nueva estructura corporativa, donde la gente talentosa puede moverse en cualquier dirección entre un rango más amplio de opciones. Cuando la empresa no les brinda las oportunidades que requieren, pueden decidir salir de la organización.

Saber qué opciones ofrecer—y hacerlas accesibles—requiere de trabajo en tres áreas: una estrategia de talento enfocada en el negocio, las soluciones adecuadas y una infraestructura que pueda evolucionar para enfrentar cualquier cosa que se presente.

El objetivo, por supuesto, es conjuntar los elementos correctos en una combinación ganadora, que permita colocar a la persona con las habilidades en rol correcto para apoyar el logro de los imperativos estratégicos del negocio. Las estrategias de talento cubren un amplio espectro de las áreas de Capital Humano, que incluye Reclutamiento y Selección, Administración del Desempeño, Desarrollo de Carrera y Planes de Sucesión; entre otras.

Los ejecutivos de todo el mundo revelan cómo se planea y que maneja su fuerza de trabajo hoy en día en el sumamente difícil entorno económico.